lunes, septiembre 15, 2008

Desaparecer...a veces...


Es verdad que uno a veces piensa que realiza cosas que no debe, según los demás sin lugar a dudas, o que en verdad debe pero no quiere hacer. ¿Es esto por miedo? ¿miedo a que? La realidad finalmente o al final del día es que termino no haciendo aquello que debía hacer y haciendo aquello que NO debía hacer.

Varias veces trato de explicármelo y llego a la misma conclusión. Me da asco pensar así, hacer así....ser así, me da terror hacer lo que debo hacer y no hago y me acostumbré a hacer lo que no debía hacer. Ahora creo que la música clásica de no se quien que se escucha de fondo es lo único que me mantiene dentro de los deslindes de lo que puede llamarse acción racional.

No me cabe ninguna duda de que realmente al momento en que se llega en estos casos es claramente crítico, te empiezas a ahogar, no puedes dormir, no puedes pensar...¿cuáles la solución? simplemente tomar alguna pastilla milagrosa que te obligue a no pensar, a no darte cuenta, a descansar, una que de verdad ayuda cuando lo único que te sirve en ese momento es querer desaparecer...

...a veces el humo que sale de mi boca no es suficiente para lograrlo...
...al parecer tampoco lo que sale mi boca ayuda...
...a veces tampoco generalmente lo que digo ayuda...
...a veces ninguna palabra ayuda...


...a veces NADA me ayuda...

miércoles, febrero 06, 2008

Despedida Terminal

Tengo que irme ya, te dije, en esos momentos que aunque estallara una bomba a tu lado no llamaría tu atención, -lágrimas-.

Abrázame -silencio-, no llores más, déjame marcharme, miraste a la gente que caminaba a nuestro alrededor como si de verdad te interesara, como si quisieras congelar ese momento para no tener que enfrentar lo obvio, -cosa que me pasa a mi más seguido de lo que tú crees-.

Te vi abrir la boca pero el ruido del metro no me dejo escuchar absolutamente nada de lo que dijiste y no se todavía si quería escucharlo, pero sin lugar a dudas lo que hubiese salido de ahí me hubiese retenido, no me iba a dejar irme, por lo que aunque te destruye prefiero no haberlo escuchado, ni siquiera recordaré que en ese momento tu estabas ahí parada con esa cara y esos ojos, cada vez que me mirabas con esos ojos no podía evitar querer apagarlos, tan inocentes, sin idea de nada de lo que en verdad depara el seguir viviendo; conociéndome.


En fin, el metro se va y yo con él...




Adiós.....nos vemos mañana en clases...