Compré 100 gramos de palabras en ningún lugar mientras caminaba por ningún camino.
Circula rauda la gente sin rostro que pareciera gritarme con sus lágrimas de sangre que brotan de sus ojos inexistentes, veo una boca que me llama con su mirada perdida hacie el infinito vacio, la escucho y nadie me habla, le hablo con ríos que emanan de mi dilatadas pupilas y no me responde.
La escucho durante largo tiempo, escucho su silencio que me envuelve y me transporta a un lecho rodeado de rosas negras que me cubren con su calor dejándome frío como la nieve que cubre mis sentimientos.
Veo gente a mi alrededor, llorando gotas de lluvia ácida, hipócrita y artera que ni a si mismos se toleran, buscando cualquier coyuntura para desahogarse de forma farsante de todo lo que hay en el pozo que ellos mismos construyeron a su alrededor dejándome ciego y alumbrándome con una luz negra que no es más que la proyección de sus almas.
Despierto y miro el reloj, son las 13:00 de la noche y ahora, después de un parpadeo, son las 25:00 de la mañana, me levanto y me visto mientras las horas retroceden quedando en una total desnudez encerrado en mi mismo y a la vista de todos los que pasan lejos de mi.
Escucho denuevo esa boca pronunciando nuevamente su inacabable monólogo melodramático que hace que el día Lúnes arda como el petróleo, que hayan aves de color de azufre y huesos que salen volando por las ventanas y sigue, sigue, sigue llamándome haciéndome pasar por sobre las tumbas de grandes héroes cuyas heridas, alguna vez condecoraciones de guerra, los hacen levantarse de sus tumbas por el dolor que producen quedando sólo polvo y cenizas.
Me lleva a través de los mares que llena en silencio el ambiente con las cosas que nunca nos dijimos que retumban y me hacen flotar sobre el agua hecha de los sentimientos que guardé hacia ti y que, hoy, al mirarlos son capaces de empaparme con su reflejo maldito y húmedo que está acompañdo por un viento que arrasa por dentro.
Ahora me conduce por los cielos de los ángeles que al verme no tardan el tocar sus trompetas anunciando mi llegada y mi partida al mismo tiempo. Sucede que ya no puedo, ya no puedo seguir esa boca que se pierde en la multitud de puntos que habitamos ningún lugar....pero hoy... hoy he encontrado una boca, una que coincide con la que me llama, que pronuncia su misma melodía que me llama sin descanso y esa boca, esa....esa es tú boca...
"y así empieza, juntos
nos vamos conviertiendo
en polvo, en sombra
en cenizas, en nada..."
sábado, agosto 06, 2005
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4 Colapsos:
señor christian: yo lo he pensado muchas veces y me he cuestionado mis deciciones a futuro.. en vez de ser un excentrico abogado lugubre por el centro de santiago.. por que no eres un genial escritor? (chilá!!) jajajaja
en serio! cuando tengamos los 3 millones, publicamos tu libro po viejo!!
ajajja un saludo! memo
Que increible...estamos conectados. No puedo creer que nos hayamos fijado en lo mismo, unos simples versos de góngora en un facsimil de PSU...me gusto mucho porque senti que se parecia a mi. buenisimo. Besitos chau
Llegué por el blog de la kote, y me sorprendí mucho.
Me llegó lo que escribiste, y espero visitar este sitio más seguido.
Saludos!
.::PaLoMa::.
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